Una terraza para ti

 


Desde aquel abrazo frío no te dejo de pensar,

han pasado muchos veranos que no logro escuchar.

Son las nubes las que ocultan la nostalgia,

es el suelo donde piso que me quema por demás.

Cuando el río crezca todo puede doler,

las cicatrices ya no las quieres por placer.

Llevas kilómetros sin reír,

Yo en la ruta te veo partir.

Sueño y te encuentro al dormir,

Crees que esto es fácil para mí,

Alquilé una terraza para ti

donde puse esperanzas sin decir

lo que siento al sonreír.

Ya nos volveremos a ver,

aunque hoy todo pueda doler,

desde que no te dejo de pensar

la nostalgia la dejo al dormir

porque decoré una terraza para ti.

Si dejaste cumplida tu misión

y no hay remedio para que vuelvas acá,

más alto que las nubes he de volar,

serán mis tristezas las que suelte al pasar

el abismo donde te pueda encontrar.

Allí volaré.

Allí te veré. 

Ya no te abandonaré.

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