Ser verdad
cada tanto me revolotean unos besos mariposa
le puse nombre al alma,
Julia no sé por qué, y al amor lo llamé simplemente Él.
Me echaron culpas ajenas y si pude perdoné,
la guitarra me acompaña y, menos mal que de madrugada
a veces me desvelo y me pongo a tocar,
mientras exploto de alegrías, penas,
mientras en el olvido suelo quedar.
Escribo letras pensando en canciones,
quizás algún día vayan a sonar,
tengo claro lo que no quiero aunque no así lo que debería esperar.
Me siento pleno por momentos, y por justa que es la vida,
por los corazones rotos que dejé atrás,
al mio hicieron reventar.
Me gusta el café a la mañana, nunca aprendí a dibujar,
un hueco en la cabeza me hizo despertar,
sueño mucho estando quieto y me guardo por demás.
Tengo miedo al cambio aunque ello sea natural
y aunque me resista todo el tiempo, todo el tiempo he de cambiar.
Tuve perro y gato, con mi abuelo iba a pescar,
tuve tanto que si hoy muero, muy bien lo puedo valorar.
Espero me entiendan cuando me pierdo, es que ni yo me suelo encontrar,
escribo lo propio, lo ajeno, escribo por que no sé llorar,
le dejo mi peso a la tierra, me gusta el piso porque me ayuda a parar de pensar,
pongo música y siento que así puedo caminar.
Por algunas salinas dejé pudrir mi soledad,
me hago aire cuando veo ego,
amo la simpleza y la humildad,
siento tantas cosas que me callo
no sé si todo lo puedo contar,
y casi todos los domingos a la tarde
dejo mis anhelos en un Ojalá.
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